Quien domina el inglés a nivel bilingüe tiene un puesto asegurado en casi en cualquier empresa, porque eso significa dar a al negocio la posibilidad de expandirse y de ser mucho más competitivo de cara a nuevas entidades que vienen pisando fuerte. Sobre todo, si tu trabajo está relacionado con el trato directo con el cliente, proveedores, vendedores o medios de comunicación, ya sabrás que las competencias del inglés son imprescindibles para moverte en un mercado tan globalizado como el que nos ampara en la actualidad.
¿Quieres saber más acerca de la importancia de dominar el inglés y hasta donde podrás llegar si consigues un alto nivel? ¡Descúbrelo en este post y motívate para seguir aprendiéndolo!
El concepto general de competencias lingüísticas es el conocimiento que el hablante, ya sea nativo o extranjero, posee de un idioma. Cuantas más y más profundas competencias se tengan en una lengua, mejor se podrá formar, transmitir y entender un mensaje, lo que determinará la calidad de la comunicación.
Si quieres aprender inglés, antes de usar las diversas técnicas y herramientas disponibles, debes centrarte en trabajar las competencias del inglés de forma individualizada, sobre todo si partes de cero, para conformar una base sólida de gramática y vocabulario que te permitan avanzar de forma correcta.
¡Veamos cuáles son las tres competencias del inglés!
Comprensión auditiva: escuchar y entender conversaciones es el primer paso para aprender un idioma y, de hecho, es la primera habilidad que desarrollamos desde pequeños cuando nos exponemos día tras día a la lengua materna. Esto no es del todo una actividad pasiva, sino que requiere de plena atención y práctica con ejercicios de autoevaluación, como cuestionarios o test que confirmen que hemos entendido correctamente el contenido. Estos ejercicios se vuelven más complejos conforme nos exigen entender información más minuciosa.
Ejercitar el oído e intentar descifrar lo que se dice es esencial para poner en funcionamiento el cerebro y ejercitar la asociación y la memoria. Intentando recordar el vocabulario nuevo y su pronunciación, será muy útil para construir frases cada vez más elaboradas.
Expresión oral: es la capacidad de poner en práctica y transmitir los conocimientos adquiridos con la audición. Se trata de la habilidad para crear oraciones lógicas y correctas con la adecuada pronunciación. Esta competencia lingüística nos permite relacionarnos e interactuar con otras personas.
Comprensión lectora: es la capacidad comprender un lenguaje escrito, interpretando tanto los signos propios del idioma como los significados de las palabras y estructuras gramaticales. La mejor forma de mejorar esta competencia es leyendo mucho, todo tipo de textos, e ir subiendo el nivel de complejidad.
Comprensión escrita: Redactar con coherencia, concordancia y de forma fluida es todo un reto para las personas que deciden aprender un nuevo idioma. Esta sería la competencia más avanzada y que, por ejemplo, en el caso de los hispanohablantes, se vuelve más difícil cuando se estudian idiomas no fonéticos.
Como sabes, el inglés se ha vuelto el idioma fundamental para todos los profesionales que quieren alcanzar un alto nivel en su carrera o potenciar su faceta más internacional. En áreas como el comercio exterior, las relaciones internacionales, la logística y otras muchas, si no sabes inglés, tendrás un serio obstáculo que superar. Pero tranquilo, como para todo, existen métodos que te ayudarán a afianzar conocimientos. ¡Te los contamos a continuación!
Escucha música y canciones en inglés: la música es una excelente manera de mejorar tu habilidad de «listening». Escucha canciones en inglés y trata de identificar las palabras y frases que escuchas. Puedes buscar la letra de la canción y seguirla mientras escuchas la música para mejorar tu comprensión. Eso sí, ¡no pases de largo del vocabulario que no entiendes!
Ve películas y series en inglés con subtítulos: elige películas o series en inglés sencillas y activa los subtítulos en inglés. Esto te ayudará a asociar palabras que escuchas con su escritura. Trata de prestar atención a la pronunciación y entonación de los actores mientras sigues la historia.
Practica con podcasts o audiolibros en inglés: escucha podcasts o audiolibros en inglés sobre temas que te interesen. Puedes empezar con opciones que tengan un ritmo de habla más lento y luego ir avanzando a audios con mayor velocidad. Intenta entender la información y toma notas de palabras o frases que no comprendas para investigarlas después.
Escritura libre: practica la escritura libre eligiendo un tema y escribiendo todo lo que se te ocurra al respecto. No te preocupes por la gramática o la estructura en este momento, simplemente deja que las palabras fluyan. Luego, revisa y corrige tus escritos para mejorar la precisión y la coherencia.
Corrección de textos: pide a alguien que corrija tu redacción y que señale los fallos gramaticales, de vocabularios, expresiones erróneas, o cualquier otra faceta que se necesite mejorar. Utiliza esta retroalimentación para aprender de tus errores y fortalecer tus habilidades de escritura.
Practica la escritura estructurada: elige un formato específico de escritura, como ensayos, cartas formales o reseñas de libros. Practica la organización de tus ideas en párrafos coherentes y utiliza una estructura clara de introducción, desarrollo y conclusión. Asegúrate de utilizar un vocabulario adecuado para el formato y variar en las estructuras gramaticales.
Intercambio de idiomas: si no puedes ir al extranjero, el extranjero vendrá a ti. Busca grupos o eventos de intercambio de idiomas en tu área, suele haber muchos planificados en las web o redes sociales de escuelas de idiomas. Estos eventos consisten en juntar a personas que desean aprender inglés o español para que conversen y se retroalimenten. Esta es la oportunidad perfecta no solo para conversar en inglés y mejorar tu fluidez verbal, sino también, para intercambiar ideas, conocer nuevas culturas y hacer nuevos amigos.
Clases de conversación en inglés: investiga si hay academias de idiomas o centros culturales que ofrezcan clases de conversación en inglés. Estas clases están diseñadas específicamente para practicar el «speaking». Podrás participar en actividades grupales, debates y ejercicios de expresión oral. Además, contarás con la guía de un profesor que te brindará retroalimentación y te ayudará a mejorar tus habilidades comunicativas.
Práctica en línea: aprovecha las herramientas en línea para practicar el «speaking». Busca plataformas de intercambio de idiomas en línea donde puedas conectarte con hablantes nativos de inglés a través de videollamadas. Puedes establecer conversaciones regulares con ellos y practicar diferentes temas. También hay aplicaciones móviles que te permiten grabarte mientras hablas en inglés y recibir retroalimentación sobre tu pronunciación y fluidez.
Como ves, además de las opciones académicas para aprender inglés, existen otras que puedes empezar a practicar hoy mismo desde casa para mejorar en tiempo récord tus competencias lingüísticas. ¡Anímate y continúa leyendo nuestro blog sobre desarrollo profesional y mucho más!