En el mundo laboral actual, la formación continua es clave para la competitividad de las empresas. En este panorama, la microcredencial universitaria está ganando terreno entre las diferentes alternativas que existen a la hora de capacitar a las personas. En este artículo, te contamos con profundidad lo que necesitas saber sobre ellas. Pero antes, vamos a compararla brevemente con otras opciones.
Las microcredenciales universitarias se tratan de certificados que se obtienen en un periodo de tiempo corto y que acreditan el dominio de una habilidad o competencia determinada. A diferencia de un título tradicional, como un grado o máster, que suponen una formación más extensa y general, las microcredenciales se centran en conocimientos concretos y directamente aplicables al mercado laboral. Por tanto, encajan a la perfección dentro de las estrategias de aprendizaje permanente al permitir a profesionales actualizar sus conocimientos o adquirir nuevos de una forma ágil y orientada a los resultados.
La Unión Europea ha sido una de las principales impulsoras de las microcredenciales, asentando las bases de estas en el Marco Europeo para las microcredenciales. Asimismo, España ha sabido adaptarse con éxito a este marco entre 2022 y 2024, integrando las microcredenciales en el Plan de Recuperación y Resiliencia, así como en la Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU). Esta integración, por tanto, muestra el compromiso por parte del gobierno español de modernizar la educación superior y adaptarse a nuevas tendencias que surgen de cara al mercado laboral.
La Ley Orgánica del Sistema Universitario publicada por el Boletín oficial del Estado (losu boe) es fundamental para la regulación de las microcredenciales en España. Esta ley sirve de gran ayuda a las universidades a la hora de implementar estos programas en sus centros e integrarlos en sus sistemas educativos, garantizando así también su calidad y reconocimiento. Además, esto es clave para la confianza en su validez tanto de las empresas como los profesionales.
La incorporación de las microcredenciales supone un gran avance en los sistemas educativos. Para las universidades, presenta la posibilidad de ofrecer formación modular, personalizada y escalable en sus centros, lo que les permite adaptarse con mayor facilidad a las demandas del mercado. A su vez, esto lleva a la apertura de nuevos públicos, incluyendo profesionales en activo que quieran ampliar sus conocimientos, egresados que busquen especializarse o empresas que quieran capacitar a sus equipos. Por tanto, con las microcredenciales la universidad consigue mejorar su posicionamiento como institución innovadora y conectada con el mercado laboral.
Si nos centramos en España, las universidades están comenzando a implementar microcredenciales piloto, así como a integrarlas como parte de títulos propios, programas cortos o formación continua. Asimismo, estas iniciativas están alineadas con el Marco Europeo de Microcredenciales, y muchas de ellas se benefician de financiación de fondos europeos como NextGenEU o el Plan de Recuperación. En definitiva, las microcredenciales son clave a la hora de impulsar la flexibilidad, la digitalización y la vinculación con el mercado laboral.
La Universidad Pablo de Olavide (UPO) fue una de las universidades que más temprano apostó por microcredenciales en colaboración con la Junta de Andalucía. Los programas con los que cuenta están orientados a competencias digitales y empleabilidad, dirigiéndose, por tanto, a jóvenes y recién titulados. Es importante destacar también que la UPO ha trabajado en programas cofinanciados por la UE, lo que muestra la importancia de estas iniciativas a nivel europeo.
La Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) es una de las universidades pioneras en el uso de microcredenciales como parte de la formación continua y transversal. Un ejemplo de ello son los programas de sostenibilidad, digitalización y transformación social. La UAB también participa en proyectos Erasmus+ y en colaboraciones con otras universidades europeas. Además, esta universidad incluye una certificación digital interoperable (Europass, Open Badges, etc.), facilitando así la validez y el reconocimiento de las acreditaciones a nivel internacional.
La Universitat Oberta de Catalunya (UOC) es referente a nivel nacional e internacional en formación online, y, por tanto, en microcredenciales. Esta universidad ofrece itinerarios modulares con microcredenciales que pueden sumar créditos ECTS. Por ellos, la UOC permite a profesionales adaptar su formación a su ritmo. Además, utilizan tecnologías blockchain y badges para acreditar los logros de sus estudiantes.
La Universidad de Granada (UGR) ha comenzado a explorar la oferta de microcredenciales como parte de su plan de transformación digital. En esta iniciativa, han desarrollado títulos propios cortos con orientación profesional en áreas como la inteligencia artificial, el análisis de datos o las competencias digitales. Un ejemplo de ello es la Microcredencial en IA en Acción: Inteligencia Artificial Generativa para Educadores.
La Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), por su modelo de negocio, tiene un gran potencial y ya ha implementado experiencias piloto de microcredenciales. Su plataforma de cursos masivos, UNED Abierta, sirve como punto de partida para esta iniciativa. Esta universidad ha trabajado con microcredenciales en competencias digitales, empleabilidad y habilidades trasversales. Además, algunos de sus cursos están reconocidos con ECTS y certificados digitales.
En Educa.Pro facilitamos la implementación de microcredenciales en tu empresa a través de una plataforma flexible para diseñar y entregar microcredenciales personalizadas, con registro de logros y certificados digitales automatizados. Además, integramos estándares europeos como Europass y EDCI y ofrecemos seguimiento, informes y conexión con un campus virtual universitario. Con todo esto, garantizamos que tu formación sea flexible, de calidad y orientada a los resultados.
Las microcredenciales universitarias representan una evolución de la educación superior, dando respuesta a los cambios del mercado laborar y las necesidades de especialización de profesionales. Su flexibilidad y reconocimiento oficial, las convierte en una opción cada vez más recurrente tanto por empresas como por personas que buscan impulsar su carrera profesional.
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